domingo, 9 de octubre de 2011

La leyenda del cadejo o cadejos está presente en casi todo centroamérica, se trata de un perro enorme de color blanco y ojos rojos que protege a los hombres cuando llegan a altas horas de la noche, sin embargo el cadejo tiene un enemigo, el cadejo negro, un ser diabólico que ataca y mata a las personas de dudosa moral, cuando ambos el espíritu protector y el diabólico se encuentran comienza entre ambos una lucha a muerte que normalmente da tiempo a la persona a huir.

El cadejo blanco como protector acompaña al hombre que trasnocha hasta su casa lo hace muchas veces desde las sombras y sin dejarse ver, normalmente se siente como un presencia que no puedes localizar. Su finalidad es defender al borracho o trasnochador del cadejo negro



El cadejo negro dependiendo de la cultura que enfoca la leyenda puede tener dos fines, matar a las personas de dudosa moral a las que no puede defender el cadejo blanco siempre a altas horas de la noche, o simplemente golpearle y aplastarle, en ambas creencias el cadejo nunca muerde (salvo en su lucha con el cadejo blanco) y causa el daño golpeando y aplastando, debido a su gran tamaño deja al hombre al que ataca como si hubiera recibido una paliza.

Hay otro perro que deambula por las noches. Es grande y negro, con un collar blanco en la propia piel. Este es el Cadejo Malo. Es enemigo del trasnochador. Apenas encuentra a este en su camino, se le abalanza, lo derriba, lo golpea, y lo deja maltrecho y sin sentido; pero no lo muerde. El tunante así agredido queda como insulso y dundo, tartamudo y se muere pronto. De este dicen que “lo jugó el Cadejo”. También el Cadejo Bueno procede así con los tunantes si estos no quieren dejarse acompañar por aquel y le gritan y lo corren y le tiran piedras. Si yendo el Cadejo Blanco acompañando a un hombre, encuentra al Negro, se traba ente ambos cadejos una sangrienta y encarnizada lucha, hasta que cae vencido el Negro. Los ojos de los Cadejos brillan muchísimo. “Parecen candelas” según el decir de los indios de Monimbó. El Cadejo no se cansa de caminar. Camina toda la noche hasta el amanecer en que desaparece...

Piensa dos veces antes de gritarle a un perro que se quite de tu camino...

fuente: http://www.escalofrio.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario